De todo o nada, o como resumo todo en un par de lineas

En dos meses, algo interesante tuvo que haberme pasado. Así que aquí va todo.
Europa 06. El 9 de abril, me llego, de mi vieja, uno de los mensajes más raros y espectaculares: “Paris ok”. Y de la nada se dio. El 1 de mayo ya estaba en un avión en camino... No voy a sacar más pica diciendo lo bien que lo pasé, de las casi 400 fotos que como buena turista tomé. Mención honrosa tendrán entonces 3 hechos.

1. Fran Petitpas y Lille. La Petit es la amiga aperrá, esa loca llevada a sus ideas que se da en todo grupo de amigos, que decidió dejar todo e irse sola a Francia y estudiar. Un aplauso. Está en Lille, al norte de Paris, a minutos de Bélgica, y verla va a quedar entre una de las mejores cosas de este año. Así de tajante. Fueron sólo horas, lamentablemente, pero lejos las que más rápido se me pasaron. Orgullosa mostró su cuidad, su primer departamento, el collage de fotos que tenía y donde iba a carretear. Era cuático, nos atropellábamos con todo lo que teníamos que decir, cómo y cuán necesario era que la otra escuchara todo lo que había pasado desde que se fue. Ni sé qué le conté en verdad, pero me acuerdo exacto de todo lo que dijo. Así que Fran, mención para ti y ese llanto final de películas. Cayendo en el cliché, las dos en la estación, sin saber que decir y sin querer separarse...

2. Cafés y libros. Mi hermana no podía estar más chata de que yo parara en cada librería. Una ñoña cualquiera en verdad, pero bueno, es lo que hay. Me habré traído unos 20 libros, pero sólo por espacio. Allá las librerías son lo mejor. Me traje incluso un libro de Babar, ese elefante rey que tenía un primo, Arturo, que junto con el mono, eran los carreteros… Y los café y el croissant, la madelaine o el éclair infaltable…Hasta me di el lujo de ir a Les deux Magots…

3. De quien te acuerdas, es quien importa… sobretodo si es mutuo. Y fue un agrado... Eso, así de simple y bunito.

Sino, la semana de vuelta fue un máximo colapso. No conocía a Murphy hasta ese entonces. Anulo el post anterior. El viernes no quería más, pero me conformo con haber tomado vacaciones anticipadas…

Después, se apareció junio… Ya, imagen ultra utilizada, pero es verdad. Ya no hay bronceado que resista, base efectiva, ni corbata robada al papa que no haya sido vista. -Lo mismo con el traje elegante, o la polerita sobria de la mama. El café ya no se compra, sino que viene en termo, y es tan común como en su momento lo fue la botellita de agua, o la manzana veraniega. En las fotocopias e impresiones uno si que se pone tacaño, llegando a poner la letra en tamaño 6 si es necesario para que todo entre en una plana y parezca menos. Además, todas las series están llegando a su fin de temporada, o clímax como algunos canales insisten en llamar. Final que uno no puede ver porque esta estudiando, y que obvio tendrá repetición el fin de semana donde uno intenta recuperar su vida, o en noviembre cuando uno de nuevo estará peleando por los exámenes de turno. Los ramos ya no se pueden botar, así que hay que aperrar hasta el final…. Y los profes, se juran con una exclusividad tremenda al momento de poner fechas, extensión de trabajos y bibliografía. La publicidad del Publimetro se queda donde esta. Ya nadie se esfuerza por sacar la portada falsa. El sudoku ya esta dominado, al igual que las abreviaciones químicas, capitales y monedas de otros países, Los hijos y nietos de Cam son como los nuevos vecinos… Lo bueno es que falta casi un mes para el cumpleaños, y aun menos para las vacaciones de invierno.

Entonces, todo unido: maduración, superación, sorpresas. Pedrito -machuca- que se pasea por su casa, y uno que se ríe de lo mas banal: las pistolas -si chiste interno, desolée-.