Memorándum

Uno: llegar e incorporarse al día – hecho-.
Dos: respirar para subir la cuesta – mal morir a mitad de camino, obvio se toma como acobardamiento-.
Tres: no jugarse en una sola apuesta – pero quien mucho abarca…-.

Cuatro: escapar de la melancolía - no se trata de ser sadomasoquista -.
Cinco: aprender la nueva geografía – posible sólo si se conoce físicamente (ambos sentidos si quieren) -.
Seis: no quedarse nunca sin la siesta – obvio-.

Siete: el futuro no será una fiesta...
y ocho: no amilanarse todavía – es “futuro” pavos -

Nueve: vaya a saber quién es el fuerte.

Diez: no dejar que la paciencia ceda – pero no hay que aprovecharse tampoco (ja, sí, hay ciertos que se pueden sentir identificados) -.

Once: cuidarse de la buena suerte – a veces es como mussho, como para una cámara indiscreta-.
Doce: guardar la última moneda – de nuevo, obvio, ¿o no? -.
Trece: no tutearse con la muerte – ni tampoco creer que el hábito hace al monje -.
Catorce: disfrutar mientras se pueda - ehh!! -


Como no todo en la vida pueden ser alegatos - aunque tengo un par, pero no son más que pequeñas críticas constructivas - y para que no piensen que soy una pobre solterona llena de mañas que sólo piensa en su gato - los odio - y en sus plantitas....He tomado un Memorándum de Benedetti, al que obvio le agregué ciertos comentarios - porque mal que mal es MI blog - Eso, enjoy... ya me inspiraré y alegaré nuevamente. (ah, ese es Valentín ... la película es buena.. como pa verla de nuevo)